Hace un año, Joaquín Panichelli era prácticamente un desconocido para el mundo del fútbol, salvo para los aficionados de la Segunda División. El argentino jugaba en el Mirandés y todavía no había explotado definitivamente. Un año después, es el máximo artillero de la liga francesa, en uno de los equipos más ambiciosos del Hexágono: el Estrasburgo. Gracias a un doblete del delantero, el equipo consiguió un heroico empate a tres en su visita al campo del campeón de Europa. El PSG, que no pudo frenarle, consiguió igualar un partido que tenía prácticamente perdido en el minuto 60, cuando perdía 1-3 y el Estrasburgo acariciaba la victoria.
El PSG arranca con fuerza pero el Estrasburgo reacciona
Las bajas y las masivas rotaciones de Luis Enrique no impidieron que el campeón de Europa arrollara a su rival nada más comenzar el partido. La vuelta de Doué le dio un aire fresco al ataque parisino, sobre todo a Bradley Barcola, que aprovechó un servicio del mediocentro para materializar el primero de los de Luis Enrique. A pesar del 1-0 en contra, el Estrasburgo no renunció a su estilo y comenzó a llevar la voz cantante de la posesión. El empate no llegó antes porque un gigante Lucas Chevalier firmó una doble parada escandalosa a un disparo de Julio Enciso.
Panichelli lidera la remontada del Estrasburgo
El Estrasburgo es un equipo joven, alegre y con las ideas muy claras. Y Panichelli, un avión en los centros laterales y máximo goleador de la liga francesa, se impuso a un flojo Illia Zabarnyi para empatar el encuentro. En esa anarquía en ciernes, apareció Valentín Barco para inventarse un pase picado que permitió a Diego Moreira rubricar el 1-2. El PSG era un castillo de naipes, y las rotaciones de Luis Enrique, esta vez, no surtieron efecto.
Un empate agridulce para el Estrasburgo
El partido se convirtió en un correcalles sin tregua. El Estrasburgo salió con hambre del túnel de vestuarios y puso tierra de por medio. El 1-3, firmado por un omnipresente Panichelli, parecía sentenciar la contienda. Pero el PSG declinó rendirse y volvió a la carga. Guela Doué provocó un penalti de Mike Penders que transformó Gonçalo Ramos. A partir del 2-3, el Parc des Princes rugió y a los jugadores del Estrasburgo les entraron las dudas y el miedo. Fue Senny Mayulu, en un error defensivo, quien hizo el 3-3. El Estrasburgo llegó incluso a tener el cuarto minutos después, en un remate de cabeza de Panichelli que se marchó lamiendo el poste. Un 3-3 agridulce para el Estrasburgo, que rozó la victoria, y un empate que puede costarle el liderato al PSG.
Fuente: AS