El Granada ha mostrado un buen rendimiento en sus últimos encuentros, ejecutando fielmente el plan de Pacheta. El equipo se ha caracterizado por su intensidad, equilibrio y claridad de ideas, pero la falta de gol ha sido una constante que arrastra desde el inicio de la temporada.
Al comienzo del curso, los nazaríes solo anotaron seis goles en siete jornadas. Esta escasa producción, sumada a una fragilidad defensiva que parece haberse superado, hundió al equipo en la tabla y obligó al técnico a buscar soluciones urgentes.
En medio de esta sequía, el Granada tuvo un respiro goleador contra la Real Sociedad B, anotando cinco tantos en media hora. Sin embargo, excluyendo ese encuentro atípico, el equipo solo suma seis goles, siendo, junto al Zaragoza, uno de los menos goleadores de la categoría. Tras ese explosivo lapso ofensivo, acumulan 240 minutos sin marcar, lo que les ha impedido sumar victorias frente a Las Palmas y el Andorra.
Jorge Pascual, a cero
La falta de puntería se personifica en Jorge Pascual, el delantero titular del Granada, quien aún no ha logrado anotar en lo que va de temporada. El atacante acumula siete titularidades y 600 minutos en el campo sin poder superar al guardameta rival, una situación insostenible para un club como el Granada.
Con las recientes lesiones de Bouldini y Arnáiz, que estarán fuera varias semanas, el conjunto granadino ha visto mermados sus recursos ofensivos. Por ello, se vuelve más crucial que nunca que Pascual rompa su sequía y que otros jugadores como Faye, Sola, Rodelas o Pablo Sáenz den un paso adelante para asumir la responsabilidad y hacer que el engranaje ofensivo del equipo funcione.
Fuente: Marca