El encuentro del Celta estuvo marcado por la expulsión de Starfelt, quien perdió los papeles y vio la doble tarjeta amarilla antes del descanso. La agresividad del defensa se hizo evidente desde el inicio, culminando en una entrada fuerte sobre Yangel Herrera que le costó la expulsión.
En un partido que exigía frialdad, Starfelt dejó su mejor versión en casa. La primera amarilla llegó por un pisotón por detrás, y la segunda, poco después, por una carga excesiva en respuesta a un empujón del jugador rival. La expulsión dejó al Celta en inferioridad numérica.
Otros jugadores destacados fueron Radu, considerado el héroe local con tres paradas de gran valor. Javi Rodríguez mostró intensidad a pesar de cometer errores. Marcos Alonso se multiplicó en defensa, y Mingueza, tras un inicio dubitativo, generó peligro en ataque y asistió en el gol, aunque fue sustituido al inicio de la segunda parte. 
Hugo Sotelo manejó el centro del campo con calma hasta su cambio al descanso. Ilaix Moriba se creció ante la adversidad, aportando un pase clave. Sergio Carreira controló su costado defensivo, y Jutglà trabajó a destajo en ataque y centro del campo. Borja Iglesias actuó como boya para dar salida al equipo, interviniendo en el gol. Pablo Durán fue letal en el ataque, estrenando su cuenta goleadora y aportando en el centro del campo en la segunda parte.
Tras la expulsión de Starfelt, el equipo tuvo que reorganizarse. Los cambios introducidos por el técnico buscaron mantener la solidez defensiva y aprovechar las oportunidades al contragolpe. Jugadores como Carlos Domínguez y Javi Rueda ingresaron para reforzar la zaga, mientras que El-Abdellaoui tuvo una clara ocasión para ampliar la ventaja.
Fonte: AS
