La expedición del Atlético de Madrid vivió una experiencia desagradable a su llegada al Emirates Stadium para preparar el partido contra el Arsenal. El equipo se encontró con la sorpresa de que no había agua caliente en las instalaciones, lo que impidió a los jugadores ducharse tras el entrenamiento.
Este inconveniente, que se mantuvo a pesar de las advertencias del personal del Arsenal, generó un gran enfado en la delegación rojiblanca, especialmente considerando que parte de la sesión se realizó bajo la lluvia. Los jugadores tuvieron que regresar al hotel sin poder asearse adecuadamente en el estadio.
El club colchonero ha presentado una queja formal ante la UEFA. La falta de servicios mínimos en un recinto de primer nivel como el Emirates Stadium es inaceptable para la entidad madrileña, y el tema será tratado en la reunión previa al partido.
Fuente: as.com