El estreno de Luis Carrión como entrenador del Real Oviedo no fue el esperado. Una derrota por 0-2 ante el Espanyol en el Carlos Tartiere deja al equipo asturiano en una situación complicada, sumido en puestos de descenso a Segunda División.
Carrión intentó imprimir su sello desde el primer día, buscando mayor presencia en el medio campo y mejor construcción de jugada. Sin embargo, solo se vio una buena versión del equipo durante la primera media hora. Posteriormente, el Espanyol fue creciendo hasta adueñarse del partido y dominar en la segunda mitad.
Sorprendió la poca variación en el once inicial respecto a la etapa de Paunovic, manteniendo el sistema 4-2-3-1. El técnico catalán había insistido en la importancia de la segunda unidad y en cómo los cambios serían decisivos, pero jugadores con potencial como Álex Forés apenas tuvieron minutos al final del encuentro. 
El técnico introdujo tres novedades respecto a la alineación anterior, incluyendo el regreso de Nacho Vidal tras lesión y Luka Ilic una vez cumplida su sanción. El once inicial fue: Aarón; Nacho Vidal, Bailly, David Carmo, Rahim; Dendoncker, Colombatto; Hassan, Ilic, Chaira; y Rondón.
Próximo partido en Girona
Con la amargura de la derrota, el Real Oviedo ya prepara su visita al Girona. Este partido se presenta como una oportunidad crucial para el equipo de Carrión, no solo por los tres puntos, sino para enderezar el rumbo en el inicio de temporada. Otra derrota podría agravar la crisis y aumentar la presión sobre el nuevo técnico.
Fonte: AS
