El delantero Luciano Vietto confesó la particular reacción de su entrenador, Gustavo Costas, tras ejecutar un penal picado que significó la victoria para Racing ante Aldosivi. A pesar del estrés que pudo haberle generado al técnico, la jugada resultó exitosa y permitió a la Academia avanzar en el torneo.
“Me dijo que le puse los huevos en la garganta, estaba convencido de que iba a salir bien”, relató Vietto sobre las palabras de Costas después de que el árbitro, tras revisión en el VAR, sancionara la mano dentro del área del Tiburón. El delantero se hizo cargo de la ejecución y selló el triunfo que ubicó a Racing entre los ocho primeros de la Zona A, consolidando su segundo puesto.
Vietto recordó su decisión de ejecutar el penal de esa manera, citando un antecedente similar hace 12 años que también culminó con éxito. Tras el gol, el atacante celebró besando el escudo de Racing, visible en el exterior del campo.
El antecedente: otro penal picado con dedicatoria
No fue la primera vez que Vietto definía un penal de esta forma. Hace 12 años, en el mismo arco y en un partido contra Unión que Racing ganó 3-0, picó otro penal. En aquella ocasión, la celebración de la hinchada de Racing incluyó una alusión al descenso de Independiente a la B Nacional ocurrido una semana antes.
El gol de Vietto ante Aldosivi
La jugada clave del partido se produjo cuando el árbitro, tras consultar el VAR, decretó penal para Racing, que Vietto transformó en el 1-0.
Fuente: Olé